
Verizon apuesta por el jefe de PayPal, Dan Schulman, para impulsar el crecimiento más allá del 5G
Verizon ficha a un veterano de PayPal para convertir la fortaleza de su red en crecimiento
NUEVA YORK — Verizon ha pulsado el botón de reinicio en la cúpula. El lunes, el gigante de las telecomunicaciones reemplazó a su CEO Hans Vestberg con Dan Schulman, el antiguo director de PayPal que transformó esa empresa en una potencia global de pagos. Schulman ahora se enfrenta al reto de convertir la ventaja tecnológica de Verizon en el tipo de crecimiento de suscriptores que Wall Street ha estado esperando.
El momento no podría ser más oportuno. Verizon presume de lo que los analistas consideran ampliamente la red 5G más sólida de Estados Unidos, sin embargo, la compañía perdió casi 289.000 clientes de telefonía de pospago en el primer trimestre. Esa es la paradoja que hereda Schulman: una red prémium que corre el riesgo de convertirse en una costosa tubería de mercancía a menos que se combine con estrategias de cliente atractivas.
Vestberg, quien dedicó seis años a fortalecer la red de Verizon, permanecerá como asesor especial hasta octubre de 2026 para supervisar la integración de Frontier Communications, un acuerdo de fibra de 20.000 millones de dólares programado para cerrarse a principios de 2026. Mientras tanto, Mark Bertolini asume el cargo de presidente del consejo de administración. La compañía reiteró su previsión para 2025, proyectando un flujo de caja libre de entre 19.500 millones y 20.500 millones de dólares.

De constructor a arquitecto
Este cambio de liderazgo refleja un giro más amplio en la estrategia. El legado de Vestberg radica en las adquisiciones de espectro y el despliegue agresivo de 5G. Pero si bien Verizon añadió 293.000 clientes de banda ancha en el segundo trimestre —la mayoría de banda ancha fija inalámbrica—, su negocio principal de telefonía móvil está bajo asedio. Las guerras de precios de T-Mobile y un mercado saturado han convertido las ganancias de suscriptores en un juego de suma cero.
Bertolini enmarcó el nombramiento de Schulman como un giro deliberado. "Dan es un líder experimentado y decidido con un historial probado de crecimiento transformador", afirmó, enfatizando la habilidad de Schulman para convertir clientes en ingresos.
El mercado, sin embargo, no se convenció de inmediato. Las acciones de Verizon cayeron 1,38 dólares hasta los 42,29 dólares tras la noticia, a pesar de haber subido hasta los 44,52 dólares a primera hora del día. Los inversores parecían divididos: entusiasmados por una nueva dirección, pero cautelosos ante el riesgo de ejecución en una industria intensiva en capital donde Schulman tiene una experiencia operativa limitada.
Una visión de pagos en un mundo de telecomunicaciones
El currículum de Schulman no es el de un ejecutivo de telecomunicaciones tradicional. En PayPal, dirigió el aumento de ingresos de 8.000 millones a 30.000 millones de dólares, multiplicó las ganancias por cinco y añadió cientos de millones de usuarios. Antes de eso, ocupó cargos de alto nivel en AT&T, American Express, Priceline y Virgin Mobile.
Tampoco es un extraño en Verizon. Schulman ha formado parte del consejo de administración desde 2018 y se convirtió en director independiente principal el año pasado, lo que le dio una visión de primera mano de las dificultades y oportunidades de la empresa. Su ascenso señala la creencia del consejo de que el futuro de Verizon no reside en invertir más miles de millones en torres y fibra, sino en encontrar formas más inteligentes de exprimir valor de lo que ya tiene, ya sea a través de mejores paquetes, experiencias de cliente más fidelizantes o complementos digitales.
Schulman marcó el tono rápidamente. "Tenemos una clara oportunidad de redefinir nuestra trayectoria", afirmó, prometiendo una disciplina de costos más estricta, un uso más inteligente del capital y un crecimiento más sólido en todos los segmentos del mercado.
El acuerdo de Frontier se avecina
Ningún reto se cierne más grande que la adquisición pendiente por parte de Verizon de los activos de fibra de Frontier Communications. Valorada en cerca de 20.000 millones de dólares, la operación tiene como objetivo expandir la huella de banda ancha fija de Verizon y promete 500 millones de dólares en ahorros de costos anuales en un plazo de tres años. Los reguladores federales han dado el visto bueno, pero varias aprobaciones estatales —la de California en particular— aún están pendientes.
¿Por qué la fibra? Porque la conexión inalámbrica por sí sola no puede soportar la carga de crecimiento indefinidamente. La banda ancha fija inalámbrica ha sido un puente útil, pero la fibra hasta el hogar (FTTH) ofrece mejores condiciones económicas en áreas densas y abre la puerta a paquetes "triple play" fidelizantes de telefonía móvil, banda ancha y contenido en streaming. Esa combinación reduce la rotación de clientes y eleva los ingresos medios por usuario.
Pero la integración no será fácil. Alinear sistemas, fusionar operaciones de campo y mantener contentos a millones de clientes mientras se buscan ganancias de eficiencia podría agotar incluso a un operador experimentado. Schulman será juzgado rápidamente por lo bien que equilibre la ejecución con la ambición.
Más allá de torres y cables
Esta reorganización del liderazgo también refleja cómo está evolucionando toda la industria de las telecomunicaciones. Los mapas de red solían decidir el juego. Ahora, lo que importa es cómo las empresas empaquetan sus servicios, tratan a sus clientes y construyen lealtad. La experiencia de Schulman en plataformas digitales encaja perfectamente en ese cambio.
Los analistas esperan que simplifique las ofertas de Verizon, alejándose de las promociones confusas hacia precios más claros que incluyan extras que los clientes realmente valoren. Las herramientas de inteligencia artificial podrían ayudar a predecir la rotación de clientes, mientras que los créditos de lealtad o las funciones de pago flexibles podrían evitar que los suscriptores se marchen.
Dado el historial de Schulman en el sector de los pagos, incluso podría incursionar en oportunidades adyacentes: convertir la facturación de Verizon en una billetera digital, añadir servicios de identidad vinculados a dispositivos o utilizar datos de pago para reducir el riesgo de fraude. Es posible que estos movimientos no creen enormes nuevas fuentes de ingresos, pero en un mercado maduro, retener clientes puede ser más valioso que buscar nuevos.
Qué deben observar los inversores
Para los inversores, esta transición establece una clásica división entre alcistas y bajistas. Los optimistas ven a Schulman absorbiendo Frontier sin problemas, desbloqueando ahorros de costos y controlando mejor la rotación de clientes, lo que podría elevar el flujo de caja libre por encima de los 22.000 millones de dólares para 2026 e impulsar las acciones hacia la franja de los 50 dólares.
Los pesimistas se preocupan por los retrasos regulatorios, los problemas de integración o una guerra de precios renovada que reduzca los márgenes. Bajo ese escenario, el flujo de caja libre podría caer hacia los 17.000 millones de dólares, arrastrando las acciones de nuevo a la franja alta de los 30 dólares.
Aun así, el dividendo de Verizon —recientemente aumentado por decimonoveno año consecutivo a 0,69 dólares por trimestre— se mantiene seguro, respaldado por un ratio de pago del 58 por ciento. Esos ingresos estables mantienen la acción atractiva para los inversores centrados en el rendimiento, incluso si el crecimiento resulta esquivo.
La capacidad de la compañía para gestionar la deuda mientras financia tanto las actualizaciones de red como la integración de Frontier determinará si tiene margen para considerar recompras de acciones en el futuro. Sin embargo, hasta que se cierre el acuerdo, los grandes planes de recompra parecen improbables.
La gran pregunta
Verizon ya ha construido la infraestructura. La cuestión ahora es si Schulman puede convertir esa infraestructura en algo más que una mercancía; si puede usar su experiencia digital y estrategias centradas en el cliente para desbloquear un crecimiento donde su predecesor no pudo.
Las primeras pistas aparecerán en los resultados trimestrales: tasas de rotación de clientes de pospago, ingresos por servicios inalámbricos más allá del rango de crecimiento actual del 2-3 por ciento, adiciones netas de banda ancha manteniéndose por encima de 250.000 por trimestre, y los primeros signos de sinergia con Frontier. Los reguladores de California, que aún están sopesando la aprobación, también podrían marcar la dirección a corto plazo para la acción.
Por ahora, Verizon sigue siendo un gigante generador de efectivo con crédito sólido y un dividendo atractivo. Lo que Schulman debe demostrar es si un líder conocido por revolucionar los pagos digitales también puede reinventar el manual de estrategia para las telecomunicaciones estadounidenses.
NO ES ASESORAMIENTO DE INVERSIÓN