
Solana se prepara para revivir la propuesta SIMD-228 tras el rechazo inicial a medida que la reforma de la inflación gana un amplio apoyo
El Debate sobre la Inflación de Solana Resurge: Dentro de la Reintroducción de Alto Riesgo de la Propuesta SIMD-228
Una Encrucijada en la Blockchain: Por Qué la Política Monetaria de Solana Está al Borde de un Cambio Radical
ÁMSTERDAM — En la Conferencia Solana Crossroads de 2025, entre una multitud de desarrolladores, operadores y asignadores institucionales, surgió un consenso silenciosa pero definitivamente. SIMD-228 — una propuesta de gobernanza previamente fallida que buscaba reducir la tasa de inflación de Solana hasta en un 80% — está lista para regresar. Y esta vez, su camino hacia la aprobación parece más seguro, más matizado y más trascendental.
No es solo una propuesta técnica. SIMD-228 es un referéndum sobre el futuro de Solana: como una red descentralizada, como una blockchain de Capa 1 competitiva y como un activo invertible en el mundo posterior a la fusión de Ethereum. Mientras los panelistas de Marinade DAO, Step Finance y Kiln Finance discutían las posibles revisiones, quedó claro que si bien la arquitectura técnica puede evolucionar, las apuestas políticas y económicas solo se están intensificando.
Reescribiendo las Reglas: De Emisiones Fijas a Dinámicas de Mercado
En el núcleo de SIMD-228 se encuentra un cambio de un programa de inflación predecible y basado en el tiempo a un sistema adaptativo y sensible a la demanda. En lugar de emitir tokens SOL en una curva preestablecida — actualmente en alrededor del 4.5% anual — la propuesta recalibra la emisión en función de la participación en el staking.
Si se hubiera aprobado en las condiciones actuales, donde aproximadamente el 64–65% de SOL está en staking, la inflación se habría desplomado al 0.87% por año. "Estamos hablando de un shock deflacionario para la economía del token", señaló un panelista, describiendo el diseño como "un mecanismo que respira con las necesidades de seguridad de la cadena en lugar de sofocarse bajo una lógica de suministro fijo".
El modelo introduce un simple ciclo de retroalimentación: un mayor staking reduce la inflación, mientras que una menor participación la empuja hacia arriba — creando una tensión dinámica entre los incentivos de seguridad y la restricción monetaria.
Voces de la Red: Una Comunidad de Validadores Fracturada
Cuando SIMD-228 se sometió a votación por primera vez, no alcanzó el objetivo — obteniendo un 61% de apoyo frente a un umbral de aprobación del 66.67%, a pesar de la participación del 74% del SOL en staking. La votación dejó al descubierto las líneas divisorias internas de Solana.
Los validadores pequeños, particularmente aquellos que operan por debajo del umbral de 500,000 SOL, rechazaron la propuesta en gran número. Temían que comprimiera sus márgenes más allá de la sostenibilidad, sacándolos de la red o haciéndolos depender de grupos de staking más grandes. "Para algunos operadores, es existencial", dijo un asistente a la conferencia cercano a la comunidad de validadores. "Esto no se trata solo de inflación — se trata de supervivencia".
Los operadores más grandes, por otro lado, vieron la propuesta como una reforma fiscal atrasada. "Emitir un 4.5% para siempre es insostenible", argumentó un colaborador del ecosistema. "Estamos quemando dilución por seguridad que ya está saturada".
Los panelistas en Crossroads reconocieron estas tensiones. Varios expresaron su apoyo a una versión revisada que introduciría reducciones más lentamente, ofrecería subsidios de transición o incorporaría recompensas escalonadas para proteger a los operadores pequeños — opciones que podrían ampliar el apoyo y evitar fracturar las garantías de descentralización de la red.
Por Qué Esta Vez Podría Ser Diferente: Surge una Nueva Arquitectura de Votación
Si bien la voluntad política parece estar cambiando hacia la reforma, la mecánica aún importa. Galaxy Research ha propuesto un nuevo marco de gobernanza — Agregación de Peso de Stake en Elecciones Múltiples (Multiple Election Stake-Weight Aggregation o MESA) — que permitiría a los validadores votar en un espectro de tasas de deflación en lugar de una decisión binaria de sí/no.
La intención es "sacar a la luz la intensidad de las preferencias y encontrar el equilibrio", explicó un investigador de gobernanza involucrado en la propuesta. Bajo MESA, los validadores más pequeños podrían apoyar un recorte del 30–50%, en lugar del 80%, lo que permitiría un compromiso y un consenso más resistente.
Si se adopta, MESA podría marcar un punto de inflexión no solo para SIMD-228, sino para la gobernanza en todo Solana — una red que históricamente ha luchado por equilibrar la claridad tecnocrática y la legitimidad democrática.
Lo Que Está en Juego: Más Allá del Código, Hacia los Mercados de Capitales
Disciplina de la Oferta y Primas de Escasez
El caso de inversión para SIMD-228 es convincente — al menos en teoría. Una reducción del 80% en la inflación podría reducir la dilución del token, estabilizar la presión de venta y fortalecer el soporte de precios a largo plazo. Varios analistas hicieron comparaciones con la narrativa del "dinero ultrasónico" de Ethereum después de la Fusión, donde los recortes de suministro coincidieron con los flujos institucionales.
Solana, que ya está en auge gracias a la renovada actividad de DeFi y la fuerte retención de desarrolladores, podría reforzar su propuesta de valor para los asignadores de capital que ven la emisión controlada como un sello distintivo de la madurez económica.
Sin embargo, este camino no está exento de fricciones. Una inflación más baja significa recompensas de staking más bajas — con proyecciones que caen de un histórico 7–12% a 1–2%. Para los inversores que dependen del rendimiento, este cambio podría impulsar el capital hacia alternativas de mayor rendimiento.
Economía de los Validadores en Flujo
La redistribución de los incentivos de los validadores bajo SIMD-228 puede favorecer la consolidación. A medida que las recompensas derivadas de la inflación se reduzcan, los validadores se apoyarán más en las tarifas de transacción y el MEV — mecanismos que inherentemente recompensan la escala y la sofisticación técnica.
"MEV es un terreno desigual", advirtió un proveedor de infraestructura de Solana. "Los operadores grandes pueden permitirse optimizar. Los más pequeños se ven exprimidos".
Si bien tal transición se alinea con la sostenibilidad a largo plazo, corre el riesgo de erosionar uno de los valores fundamentales de Solana: la participación abierta y descentralizada. Si los operadores más pequeños son excluidos por el precio, la red podría derivar hacia la centralización, incluso si es técnicamente segura.
Efectos Secundarios en DeFi y la Liquidez
Una menor emisión de tokens también tiene repercusiones en DeFi. Con menos tokens inundando el mercado, los protocolos de préstamo pueden ver una reducción en la rotación de garantías, mientras que los proveedores de liquidez podrían exigir mayores rendimientos para compensar el costo de oportunidad.
Dicho esto, la escasez puede atraer capital de calidad. "Podríamos ver tasas de endeudamiento más estables, menos vertidos especulativos y una retención de tokens más fuerte en DeFi", señaló un colaborador de Step Finance.
Qué Sucede Después: El Camino Hacia una Segunda Votación
El momento de la reintroducción de SIMD-228 sigue siendo fluido, pero el impulso es claro. Se espera una propuesta revisada en las próximas semanas, con el respaldo de actores clave del ecosistema. Si esa versión incluye un despliegue más lento, capas de protección para los validadores pequeños o votación al estilo MESA sigue sin decidirse — pero la escritura está en la pared.
"El consenso ya no se trata de si la inflación debe caer, sino de cómo hacerlo sin quemar puentes", resumió un desarrollador.
Esta evolución marca un momento de maduración para Solana. A diferencia de los caóticos episodios de gobernanza de ciclos anteriores, este debate — por intenso que sea — señala un ecosistema que lucha con el largo plazo, las compensaciones y la alineación institucional.
El Panorama General: Solana en una Encrucijada
Para los inversores profesionales que siguen las guerras de Capa 1 de las criptomonedas, SIMD-228 es más que un simple ajuste de gobernanza — es un indicador de cómo Solana pretende navegar la escala, la sostenibilidad y la descentralización bajo presión económica.
La próxima propuesta pondrá a prueba si la red puede conciliar esos objetivos — o si se fracturará bajo intereses contrapuestos.
Una cosa es cierta: en esta nueva era monetaria para Solana, la tasa de inflación no es solo un número. Es un compromiso político, una tesis de inversión y una línea de vida para los validadores — todo a la vez.
Y la próxima votación puede redefinirlos a todos.