
Presidente de la Reserva Federal Powell se Mantiene Firme en las Tasas a Pesar de la Presión de Trump y la División Interna de la Fed
Powell, de la Fed, afronta el crisol de la política y las decisiones mientras la presión para el recorte de tasas se intensifica
Mientras el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, se prepara para su testimonio ante el Congreso esta semana, se encuentra atrapado en un fuego cruzado cada vez más intenso entre las demandas políticas, las expectativas del mercado y la disidencia interna que amenaza con socavar la independencia cuidadosamente cultivada del banco central. Con las tasas de referencia mantenidas estables en 4,25-4,5% desde diciembre, el próximo movimiento de la Fed se ha convertido en un punto crítico en un debate económico más amplio sobre la inflación, los aranceles y la sostenibilidad del crecimiento.
El acto de equilibrio del funambulista
En sus declaraciones preparadas para el Congreso, Powell no señaló recortes inmediatos de las tasas de interés, enfatizando que los sólidos indicadores económicos dan tiempo al Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) para evaluar los datos entrantes antes de ajustar la política monetaria. Esta postura cautelosa se produce a pesar de las críticas públicas sin precedentes del presidente Donald Trump, quien ha exigido "al menos dos puntos porcentuales" en reducciones de tasas, caracterizando la posición actual de la Fed como "mala praxis monetaria".
"Powell ha pasado de ser un defensor contra la inflación a un pararrayos político", señaló un veterano analista de la Fed en una importante firma de Wall Street. "Está caminando sobre la cuerda floja entre preservar la credibilidad institucional y responder a preocupaciones económicas legítimas, todo mientras los vientos políticos se vuelven más fuertes".
Grietas en el frente unido de la Fed
Lo que hace que esta coyuntura sea particularmente trascendental es la fractura emergente dentro de la propia Fed. Las proyecciones de la semana pasada revelaron una división marcada: diez funcionarios anticipan al menos dos recortes este año, mientras que siete no prevén ninguno, una división que se ha ampliado desde marzo.
Dos designados por Trump, los gobernadores Michelle Bowman y Christopher Waller, han roto filas públicamente, señalando su apertura a un recorte de tasas en julio si la inflación se mantiene contenida. Bowman, hablando desde Praga, declaró que "abogaría por bajar la tasa de política en nuestra